La razón de esta mayor beligerancia se debe a que este lunes, 4 de diciembre, concluye el plazo legal establecido para que todos los bienes, servicios y entornos de interés sean accesibles a todas las personas.

Este manifiesto se titula ‘Sin accesibilidad universal, no hay derechos humanos para las personas con discapacidad’, y en él denuncia el efecto que estos obstáculos que evitan la accesibilidad tienen sobre las personas con discapacidad.

“Las violaciones más insistentes e insidiosas de los derechos humanos de las mujeres y hombres con discapacidad, las discriminaciones y exclusiones más generalizadas que sufren con mayor intensidad, tienen que ver con la inexistencia o con las carencias de accesibilidad universal, que constituyen obstáculos muchas veces insalvables para llevar una vida independiente libremente decidida, y alcanzar una completa inclusión en la comunidad”, asevera el texto publicado por la organización.

Además, el CERMI añade que las mujeres y las niñas con discapacidad están más expuestas a sufrir los efectos negativos de la falta de accesibilidad universal, por lo que el comité reclama un “exigente” enfoque de género para combatir esta discriminación.